Nov 29, 2006

"Pero es muy poco ecológico..." me dijo cuando le saqué la foto, porque fumar en estos tiempos es mal visto, porque los viciosos son perseguidos como delincuentes, así es que escapando de la ley llegamos donde llegan los lugareños y los afuerinos: donde la Sole. "La Última Frontera" fue literalmente eso, donde el afuerino Gustavo Boldrini encontró el lugar para saciar su sed de pucho bajo la sombre titilante de un enorme castaño. Mientras escribo esto pienso que nada de lo que ahora diga podrá superar la expresión de su mirada, de su mano, de sus labios besando ansiosamente el cigarrito indefenso que se consume implacablemente, despiadadamente, como consumió Raín a sus mujeres, violentamente, pero a pesar de eso uno termina queriéndolo, echándolo de menos, sintiéndolo. No importa Gustavo, nunca vas a ser poco ecológico, fuma no más.
PARE miéchica, como dice Ricardo a lo que no le parece, porque la verdad es que este valdiviano no tiene pelos en la lengua para decir NO. Ricardo Mendoza es de los antiguos de este pueblo, originario, sabe de todo, se acuerda de todo, ve debajo de las piedras, de los musgos, a través de la niebla...y por eso será que lo nombraron Director del museo de Niebla. Allí realiza una labor notable, arribita mismo del fuerte Niebla, donde antaño los obcecados españoles no soltaban la teta que los tenía contentos y que después de Cochrane, de su dorado no queda más que una bella ruina. Y si de ruinas se trata, Ricardo tiene su propia teoría sobre el destino aparentemente ruinoso de Valdivia, pregúntenle a él! Mientras, PARE de soñar que la reconstrucción de este pueblo va por un puerto en Corral, una Celulosa, un Portal Valdivia, una nueva región. PÁRELE puhiñor!