Ayer fue la esperadísima (por mí) presentación de Stephen Hawking en Valdivia. Llegamos a las 3.10 de la tarde, pensando que estábamos bien en la hora, pero el coliseo ya estaba lleno. Nos costó encontrar tres lugares medianamente cerca y con buena vista. A las 4 y cuarto, con el estadio rebosante, empezó la función con Bunster presentando el evento (financiado en parte por Arauco, puaj!). Luego se apagaron las luces, trono la música tipo guerra de las galaxias, salió humo tipo concierto de Pink Floyd, los focos de puntos azules iluminaron el humo y el techo y de detrás de unas cortinas negras apareció el genio acompañado por una señora rubia y delgada que lo acomodó frente el micrófono, todo en medio de la ovación del público. Intentaba ser espectacular, pero daba un poco de vergüenza ajena lo rockero de la producción ...Hawking nos saludó cariñosamente con su voz de Caliban y comenzó su amena, entretenida y divertida exposición. El hablaba en inglés y 4 pantallas traducían a subtítulos en castellano, junto a algunas imágenes en power point. En las pantallas del medio se veía su cara, que movía a veces en algunos gestos de la mejilla. A pesar de las tallas que echaba de los hoyos negros, al más puro estilo Woody Allen, no se reía. Obvio, no puede. Cómo será eso, enojarse o reírse pero no poder expresarlo físicamente...Después de 40 minutos nos dijeron que todo lo bueno acaba y que sería todo, chao. Afuera nos encontramos con PedroJuanyDiego, obvio, casi todo Valdivia estaba ahí. En la noche agarré mi libro de Hawking y seguí leyendo, y aunque fue algo único y especial el haber podido estar en su conferencia, siento que estoy más cerca de él y de sus pensamientos leyendo en el silencio de mis sábanas, imaginando el vértigo de las distancias y hoyos negros y del espacio-tiempo que se curva.

Mis amigos de acción por los cisnes enviaron hoy un saludo a Hawking que no puedo dejar de publicar, es simplemente genial: DESDE VALDIVIA SALUDOS A HAWKING Y LA TEORÍA DE LAS SUPERCUERDAS.